El sistema Bag in Box cuenta con numerosas ventajas respecto a otros envases convencionales:
- Perfecta conservación. Es el único envase del mercado preserva su contenido durante
más de seis semanas después de su apertura al mantener dicho contenido al abrigo de la
luz y del aire. Evitando así la oxidación y conservando las características organolépticas
del producto envasado de la primera a la última copa.
- Óptimo diseño para el almacenaje y transporte. El Bag in Box está ideado para
aprovechar el espacio al máximo. El producto ocupa más del 97% del área total del
envase y éste a su vez está diseñado para que se puedan apilar sin dejar espacios de
aire entre. Además se ha de tener en cuenta que los envases vacios ocupan muy poco
espacio.
- Ligero y robusto. La bolsa metalizada cuenta con la protección de una resistente caja
de cartón ondulado de alto gramaje.
- Múltiples formatos. El sistema Bag in Box existe en diversos formatos: 2L, 3L, 5L,
10L, 15L, 20L, 100L y 200L.
- Ecológico. Sin duda el Bag in Box es uno de los sistemas de envasado más ecológicos
del mercado. Fácil de reciclar y con una huella de carbono más favorable que otros
envases alternativos. Además, al contar con un diseño que optimiza el transporte, la
contaminación causada éste es mucho menor que en otros envases alternativos como las
botellas de vidrio, donde gran parte de área transportada es aire.
El conjuto de éstas características hacen del Bag in Box un envase práctico, ecológico y de futuro.